Por aquellas ocasiones en las que das con una persona con la que disfrutas, te diviertes, amas, quieres…..y piensas…
“¡Estaba predestinado, esto era para mí!”
Por aquellas ocasiones en las que conoces a alguien que te hace sufrir…
e intentas convencerte de que todo ha sido irremediablemente fruto del destino,
tu destino,
que “tenía algo que enseñarte”
Por aquellas en las que te topas con alguien que te hace reír, disfrutar, aprender, amar…pero también llorar, sufrir, lamentar…. y piensas…
“Todo pasa por algo”
Por todas aquellas veces en que despiertas y te percatas de que
el azar, la suerte, la casualidad
forman parte irremediablemente de cada día, cada hora, cada minuto e incluso cada segundo de tus vidas…
Y de las que inevitablemente depende en gran parte el que alguien pueda entrar a formar parte de la lista de personas que integran tu vida,
que por el contrario alguien pase a formar parte de la interminable lista de personas que simplemente han cruzado la mirada contigo durante unos segundos
una mañana, una tarde,
una salida de la discoteca, del metro…
o de aquella lista de personas de cuya existencia no eres consciente…
porque la casualidad o el azar así lo han provocado.
Por todas las personas que han pasado por mi vida…
hayan sido fruto de la llamadas suerte o azar o casualidad,
o por un cúmulo de circunstancias diversas que
nada tienen que ver con los ilusorios influjos del sino.
Por aquellas que siguen y también por las que se quedaron en el camino,
porque, quiera o no,
ellas son las responsables de la persona que soy hoy.
*SaRa*